miércoles, 19 de marzo de 2014

Fragrance Of Death

Un día cualquiera en una pequeña ciudad, vivía una familia que se componía de 4 individuos.
Uno de ellos era Marie, una señora de unos 47 años de edad, no muy alta, pelo castaño y rizo , algo largo.
Otro de ellos era Frank, era el hombre de la casa, tiene 48 años y es alto, pelo negro, apuesto, un hombre agradable al que le gusta cuidar de su familia.
Después nos encontramos con la pequeña Alice, ella es una adolescente, de unos 16 años, tiene el cabello largo por la cadera, y negro como el carbón. Sus ojos son de un azul que se ve algo especial por como le brillan los ojos. Es una chica responsable, callada, tímida, y bueno, con una historia peculiar que os iré contando.
Por ultimo está Shiro, que es el gato de Alice, ella le tiene mucho aprecio, es un lindo gato negro y con unos "calcetines" y una "corbata" blancos en su pelaje.
Y aquí comienza la historia.
Alice se dirigía al instituto, no tenía muchas amistades allí, se podría decir hasta que carecía de ellas, ya que era demasiado callada y no se le daba bien relacionarse. Ella era única, se distinguía bastante de las demás chicas del instituto por su manera peculiar de vestir.
De camino al instituto siempre llevaba unos auriculares donde ella podía separarse de ese mundo y dirigirse al mundo de su imaginación.
Al llegar a clase se dirigió directamente a su pupitre sin mantener ninguna conversación con nadie, ya que no se llevaba bien con la gente de su clase, estes siempre se metían con ella y no la dejaban vivir en paz.
Mientras Alice estaba tranquila en su asiento deseando que tocase el timbre para ir de nuevo a su casa, se le acercó una compañera de clase, se llamaba Ashley, era la típica niña mimada que se creía la reina del mundo, cosa que Alice odiaba.
Cuando se acercó a ella ya se empezó a meter con su manera de vestir, y demases.
-¿Que pintas son esas? jajaja, no deberías de haber salido de casa jajaja- Dijo Ashley entre carcajadas-
-Mi manera de vestir no te incumbe, déjame en paz y vete a otro lado a molestar- Le contestó Alice molesta-
Al final Ashley dejó a Alice en paz y volvió a su asiento.
Después de una larga mañana Alice deseaba llegar a casa, y nada más llegó se dirigió al baño de su habitación a llorar. Ella estaba harta de que se metieran con ella por ser como es realmente, nunca la dejaban en paz y la llevaban acosando desde pequeña.
Sin pensarlo ella quería aliviar su dolor, y cogió una cuchilla que guardaba en un cajón del baño y se cortó varias veces el brazo...
Ella sabía que eso no estaba bien, pero le aliviaba y eso era lo que ella quería...
Nadie sabía sobre esto, ya que ella no se lo contaba a nadie y se tapaba siempre las marcas de las heridas para que no la descubrieran, Alice buscaba una forma de salir de ahí, de ese asqueroso mundo, y estaba dispuesta a hacer lo que fuera para conseguirlo...

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